sábado, enero 19, 2008

Microtextos Aleatorios

Solamente para explotar la sensacion, nada mas que para eso, la sensacion que me genera el recordarte, porsupuesto entiendo porque, eres el objeto, o el ente gatillante de sensaciones que hace bastante no siento. Un poco porque me he negado, otro tanto porque creo debo ir mas lejos .. y esta vida que llevo si creo es una via para eso, quedarme en una sensacion de pronto puede ser muy tentador, pero hay que cambiar, hay que aprovechar de ser y hacer mas cosas, de flotar el la incosistencia de las nuevas experiencias.. saborearlas, olerlas , palparlas, oirlas y verlas . para que, pff..no me desgastare en esa respuesta .. esta en todos por supuesto, sobre todo cuando lal muerte es un hecho seguro .. ahora que lo digo, quiza la muerte no sea como he pensado el fin de todo y punto .. quiza es el fin pero del enclaustramiento en el cuerpo, quiza sea el paso a la verdadera libertad..................libertad, casi ya me suena mas importante que la palabra belleza. Que DIABLOS solo me importa a mi.
QUIZA! amo y odio esa palabra.

3 comentarios:

sueñoscaidos dijo...

=)

silente dijo...

REEEEEEEEEEEEKKSSS



E VUELTO A LAS TABLASDELAPOESIAENFERMAA

.:Maika:. dijo...

"...el ente gatillante de sensaciones que hace bastante no siento" suena demasiado familiar... y a veces me he preguntado si no lo sentimos porque somos incapaces o porque no deseamos sentir. Como sea, hay algo claro: algunas personas, simplemente, no nacimos para estas cosas de los sentimientos. Nuestro camino es una mera sucesión temporal, un par de pasos entre la génesis y el final. Los puntos suspensivos que quedan en medio son la mera unión de lo uno y lo otro.
El panorama otroga cierta redención de los usuales errores, pero condena a una soledad perpetua, de la clase de soledad llena de gente que iensa diferente. Y nosotros, ya seamos los erroresw o los aciertos -realmente- somos diferentes, no en una asepción especial del setr humano sino en un algo incomprensible y absurdo.
Por qué llegar y por qué permacenemos aún siendo conscientes de ello, sea, quizás, la únoica búsqueda que nos mantiene vivos.
...claro, siempre puedo estar equivocado y -a estas alturas- usted ya es muy consciente de ello.
Saludos, caballero Elías.